De ellas he recibido una foto del puente Don Luis I, todo un símbolo que une ambos lados del río Duero, Oporto y Vila Nova de Gaia.
Se inauguró en 1886 y, aunque muchos piensan que fue obra de Gustav Eiffel por su estructura de hierro, lo cierto es que lo diseñó uno de sus discípulos, Téophile Seyrig.
El puente mide 395 metros de largo y 8 metros de ancho y está formado por dos pisos. Por el piso superior circula el Metro, mientras que por el piso inferior, circulan los coches. Los peatones pueden utilizar los dos pisos para cruzarlo, pero las vistas desde el superior son increíbles. Por lo tanto, se convierte en un magnífico mirador desde donde se observan los barcos tradicionales navegando, las famosas bodegas de Oporto en una orilla y las viejas casas de colores del barrio de Miragaia en la otra.
Almudena y Noa brillan por las calles de Oporto y, juntas, vayan donde vayan, dejarán su huella y darán mucho que hablar muy pronto.
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