Llega la Semana
Santa, se acerca la celebración de la Pascua. Comenzamos a
pensar en los tradicionales huevos y conejos de chocolate.
La relación entre el conejo y la Pascua solo tiene una explicación con algunas antiguas leyendas.
La más común es aquella
que relata que en el sepulcro donde fue enterrado Jesús había un conejo que
presenció su resurrección. El pequeño animal quiso comunicar la buena noticia y
como no podía hablar, se le ocurrió repartir por las casas huevos pintados, significado de
vida y resurrección.
Mi pequeña aportación a
la Pascua es Bunny, el conejo de chocolate, pero os recuerdo un dato importante…no se come.
A las propiedades del chocolate, hay que sumar las del salvado de avena porque tiene una acción hidratante y emoliente para la piel, rica en vitamina y minerales.
A las propiedades del chocolate, hay que sumar las del salvado de avena porque tiene una acción hidratante y emoliente para la piel, rica en vitamina y minerales.
No me lo puedo creer, que cosa tan bonita. Es una idea perfecta para mis hijos, aunque tendré que convencerlos para que no se lo coman.
ResponderEliminarBueno guapa un besito muy fuerte.
Cristina.